Perro Polar Argentino – Razas extintas

Es una raza que demuestra la capacidad que tiene el humano de crear y experimentar a su conveniencia, pues nació de la necesidad de un grupo de militares argentinos especialmente veterinarios que exigian un ejemplar canino con la capacidad de desplazarse largas distancias, arrastrando pesadas cargas sin problema, y sin dificultades para ser criado. Básicamente, necesitaban un ayudante perruno en las labores de transportes mecánicas, y labores militares. Tenían un entrenamiento diferente y especial y rendian muy bien en las labores, convirtiéndose además en perros de compañía para el personal militar.

Sus características físicas, eran al mismo tiempo, cualidades especiales, su capacidad de arrastre en trineo superaba por mucho a todos sus antecesores. Su adaptabilidad a las temperaturas (su soporte era incluso de unos -70 grados), y a todo tipo de entrenamiento demostró resultados mucho más satisfactorios que los perros de los que fue creado.

Eran perros de medianos a grandes, con extenso y sedoso pelaje, mayormente negros con blanco, orejas erguidas y ojos medianos. Sus patas y uñas eran grandes. con excelente capacidad de desplazarse en la nieve. Tenían una gran similitud con los lobos, y sus habilidades de caza también son dignas de mencionar.

El Tratado Antártico de Protección del Medio Ambiente (TAPMA) viene a darle un fin trágico a esta raza de perros después de que con este tratado se determinara que los perros polares transmitían a las focas enfermedades que causaban su muerte, y se ordenó la expulsión de estos perros del continente. Wikipedia nos ofrece la siguiente información sobre las fases de expulsión de estos caninos: “los 58 ejemplares existentes fueron divididos en dos grupos de 30 y 28 animales y trasladados desde la Antártida Argentina al territorio argentino de la sudamericana isla Grande de Tierra del Fuego también incluida en la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur”.

Aunque Argentina no estuvo de acuerdo con el veredicto del TAPMA, tampoco continuó dando apoyo a los ejemplares restantes. Y si bien la inmunidad, la expulsión, la vejez y las condiciones inclementes a las que estos se sometieron fueron sentando las bases del adiós a estos increíbles perritos.