Paso a paso para asear la oreja de tus perros

Este es uno de los cuidados más importantes a la hora de asear a nuestras mascotas. Incluso la entrada de agua en sus oídos puede desencadenar problemas graves a largo plazo que podemos evitar completamente si tenemos una buena higiene, y un correcto cuidado en estas áreas.

Para los perros es de extrema importancia tener el sentido auditivo en excelentes condiciones, porque les permite estar alertas a todo tipo de situaciones, les hace sentir en confianza y sin temor. La suciedad y algunas enfermedades pueden obstruir esta cualidad, causandoles desorientaciones, pérdida de la visión, y fuerte dolor.

Tienes que tener en cuenta que su limpieza va a verse condicionada también por la morfología de sus orejas, que es determinada por su raza. Por ejemplo, en perros con orejas caídas se ha presentado menor cantidad de suciedad, pero se ha registrado mayor cantidad de humedad, causadas por el calor o por baños mal realizados. En perros con las orejas alertas como un Pastor Alemán, almacenan menor cantidad de humedad (aunque no están exentos) pero hay más probabilidad de la entrada de polvos o animales indeseados.

La limpieza es parecida a la que te harías a ti mismo en casa. El grado de dificultad se verá determinado por cuán inquieto, dócil o ansioso sea tu mascota. Puedes aprovechar los momentos de descanso, hacerle cariños en la parte de su cabeza y cara haciéndolo sentir cómodo y en confianza y muy cuidadosamente proceder a la limpieza.

• Limpia el exterior de su oreja con un pañuelo gasa humedecido en agua, el exceso de suciedad en el pelaje que rodea a las orejas puede ser un gran causante de la otitis en tus mascotas por la entrada de agentes contaminantes.
• Utiliza un producto de limpieza especial para los oídos de los perros, y muy cariñosamente comienza a limpiar los orificios auditivos. Sé paciente, sé cuidadoso, recuerda que es tan molesto para ellos como para nosotros.
• Deja entrar un poco de este líquido siguiendo instrucciones específicas del envase para que la limpieza sea más profunda y se logren limpiar los canales auditivos. Para esto debes masajear muy bien su oreja y secar el exceso con la misma gasa.
• Dale un snack de premio por la paciencia y repite este proceso cada dos semanas o según te sea indicado por tu veterinario.