Tu portal de ayuda para tu mascota

Bichón Maltés

Aunque no está muy claro de qué lugar específico provienen, se considera que son originarios de la costa del Mediterráneo y que descienden de una antigua raza egipcia. De hecho, se han encontrado esculturas de perros muy similares al Maltés en la tumba de Ramsés II. El filósofo griego Aristóteles también los menciona en algunos de sus tratados bajo el nombre de “canes melitenses”. Pese a su denominación, no son típicos de la isla de Malta. En la antigüedad, estos canes solían vivir en las zonas portuarias y de ahí que su nombre provenga de la palabra “màlat” (“puerto” en los idiomas semíticos). Su función era cazar ratas y ratones, evitando así que infestaran los almacenes y las bodegas de los barcos. El Bichón Maltés se expandió por el resto de Europa durante la época victoriana, cuando fue cruzado con otras variedades como los Caniches o los Spaniels. La raza fue reconocida oficialmente en 1954.

Es un perro de tamaño pequeño, cuerpo alargado, porte distinguido y elegante. Su cabeza es ancha, con los ojos grandes y redondos, oscuros y ligeramente protuberantes, y las orejas de implantación alta y semi-caídas hacia adelante. Está cubierta de pelo muy largo y blanco. Su cola es moderadamente larga describiendo una sola curva grande. Su pelaje es de una sola capa, largo, brillante, sedoso y llega hasta el suelo; es siempre de color blanco, pudiendo ser un blanco manchado o marfil. Por lo general ronda entre los 3 e incluso 4 kg, tampoco medirá más de 25 cm de altura. Por su tamaño, se adapta perfectamente a apartamentos reducidos.

El Maltés ha sido desde siempre una raza de compañía que en las zonas portuarias cumplía con la función de controlar las plagas de roedores en los barcos y hacer además de ruidoso guardián. Son aptos para la vida rural y la urbana aunque prefieren la vida en interiores y les es buena cualquier tipo de familia aunque detestan, eso sí, la soledad. No requieren ejercicio excesivo pero aprecian las salidas, juego y actividad de calidad. Les agradan las excursiones y pese a su aspecto delicado pueden demostrarse perros duros y resistentes en cualquier actividad que se les proponga. En familia son compañeros que se muestran vivos, equilibrados, sociables, alegres, afectuosos y buenos con los niños. Aprenden con facilidad y su adiestramiento es relativamente fácil. Se suelen comportar bien con otros perros y pueden llegar a convivir con otros compañeros caninos o incluso felinos.

Son canes muy juguetones y enérgicos dentro del hogar. Una buena idea es conseguir juguetes para que se entretengan en casa y sacarles a pasear al menos una vez al día para que realicen un ejercicio moderado. Son propensos a pasar frío en zonas muy húmedas. No debe realizar paseos muy largos antes de los 8 meses de edad, pues sus frágiles huesos aún están en desarrollo. Durante las salidas al exterior siempre procura cuidar su relación con otros perros, pues no es consciente de sus dimensiones y puede ser lastimado sin querer. Su pelaje requiere un cuidado especial. El cepillado diario es necesario para evitar enredos y que se mantenga aseado, ya que su manto blanco se ensucia con relativa facilidad. Lo positivo es que, al tener una sola capa, no pierde demasiado pelo. Los baños deben ser regulares, al menos una vez al mes. Se recomienda desenredar su pelo manualmente antes de mojarlo, pues si se intenta hacerlo luego será mucho peor.

Entre las afecciones más frecuentes del Bichón Maltés están los problemas de rótula, algo habitual entre ejemplares son sobrepeso. Los problemas oculares, como la conjuntivitis o la atrofia progresiva de retina, también tienen una mayor incidencia en ellos. Asimismo, pueden tener afecciones renales congénitas causadas por un mal funcionamiento del hígado o padecer de hipoglucemia. Pueden verse atacados por el Síndrome de Shaker o de Perro Blanco Temblador, una condición que les provoca temblores en todo el cuerpo, falta de coordinación o movimiento rápido de los glóbulos oculares. Se trata de una afección que no es dolorosa, pero que debe ser tratada por un especialista. El colapso traqueal también se manifiesta con cierta regularidad en esta raza. Esta dolencia impide la respiración normal del can y se manifiesta a través de una tos ronca y persistente, lo que a veces hace que tenga que ser intervenido quirúrgicamente.

¿Te gusta Pets & Puppy?

¡Suscríbete gratis y recibe nuestros artículos en tu email!

Mis Publicaciones